Comprar un carro nuevo o usado es el sueño de muchas personas y familias en Colombia, y aunque hay sitios confiables, el crimen siempre está al acecho de víctimas, especialmente en los negocios de usados.
Los estafadores saben que es un mercado amplio y en crecimiento, pero en el que también hay mucha informalidad, un escenario fértil para las estafas. Pesar los esfuerzos de las autoridades para contrarrestar estos fraudes, lo cierto es que la ingenuidad, el desconocimiento y la falta de información son aprovechadas por los delincuentes.
Hay muchos sitios para buscar un carro usado. Están los concesionarios y los sitios virtuales de internet, que hoy en día son los preferidos, entre otras razones, porque allí se anuncian los vehículos de reconocidas vitrinas de usados.
Si comparará usado
Una vez tenga claro el presupuesto y cuál es el carro que quiere y necesita, tómelo con calma y no se ‘enamorará’ a primera vista o actúe por impulso. La primera recomendación es buscarlo entre amigos de confianza, familiares o vecinos, es decir, un carro que usted ya haya visto y además conozca su procedencia y cómo lo han tratado.
Si no es posible o no lo encuentra por esta vía, busque en concesionarios reconocidos en su ciudad. Haga una búsqueda en los portales especializados, compare los precios de la misma marca y modelo. Así podrá establecer un medio de valor en el mercado.
Desconfíe de los carros que le ofrecen por un precio muy inferior al mercado, y si el vendedor le da muchas vueltas para darle información. Los vehículos en esas condiciones pueden ser robados o tener un daño cuya reparación puede ser muy costosa.
Pida al vendedor la copia de la factura de compra original del vehículo, la carta de compraventa; la licencia de tránsito y una copia de la tradición del vehículo, ahí aparecen los dueños que han tenido el vehículo.
No conforme con los documentos físicos, tenga en cuenta que pueden ser falsificados. El pago de impuestos lo puede verificar en las páginas de internet de las secretarías de las hacienda de la ciudad donde está matriculado el carro.
Usted mismo también puede verificar los antecedentes del carro a través de la página web del Registro Único Nacional de Tránsito, Runt. Con solo digitar la placa, podrá conocer en detalle los antecedentes del vehículo como accidentes registrados, tipo de accidentes, embargos o tomas inscritos, histórico de propietarios; vigencia de la revisión técnica y mecánica y del SOAT. Si el vehículo tiene límites legales; y las características del vehículo (número de motor, chasis, cilindraje, marca).
Si está interesado en conocer, además, la información de propietarios y su identificación, debe seleccionar la opción SÍ, en el enunciado que aparece en la solicitud. Hacer esa confirmación tiene un avalúo de un poco más de 32.000 pesos.
También puede comunicarse con la División de Automóviles de la Policía Nacional o Dijin. Allí le hacen una trazabilidad al vehículo y verifican que el auto no tenga antecedentes judiciales, que haya sido usado en un ilícito, que sea robado o requerido por una autoridad legal por embargos. Y algo muy importante, verifica que los números de serie del motor y chasis no hayan sido alterados.
Desconfíe de concesionarios que ‘inauguran’ en un sector de la ciudad de un día para otro. Con sus empresas ‘fantasma’ que se esfuman así como aparece. Nunca entregue dinero por adelantado hasta no verificar toda la información. Esta empresa solo presenta documentos que una simple vista son muy convincentes, pero al final se quedan son su dinero.
En la medida de lo posible, asesórese de una persona que conozca algo de carros y de negocios. Con motivo de los estafadores no solo buscan quedarse con su dinero, hay otras estafas como las de tipo mecánico en los autocares usados:
Adulteraciones, maquillaje y camuflaje que ocultan daños, reparaciones mal hechas y descubiertos extremos en el interior y exterior del vehículo.
Si un vendedor va
En este caso, también es recomendable intentar vender su vehículo entre amigos o familiares; o publicar el anuncio únicamente en portales especializados y reconocidos del sector.
No ofrece el vehículo en ferias o sitios públicos que no cuentan con garantías ni respaldo.
Si la oferta de un precio de compra es excesivamente superior al valor comercial, tenga cuidado, puede tratarse de una estafa, o el comprador busca un carro con características especiales para cometer un délito.
Tenga mucho cuidado al mostrar su vehículo, consiga un compañero y, si es posible, llévelo a un parqueadero de un centro comercial conocido. Nunca en su casa o en la calle.
Igual procedimiento debe hacer al hacer el día de la entrega, una vez haya verificado las transacciones y que la documentación esté en orden. Por ningún motivo firma traspasos abiertos.
Asegúrese de que la negociación y el traspaso del vehículo sean tramitados directamente con el nuevo propietario.
Si estás interesado en este o más temas relacionados con vehículos, escríbame a carcam@eltiempo.com.