El enviado de Estados Unidos para el clima, John Kerry, dejará su cargo en los próximos meses para participar en la campaña electoral del presidente Joe Biden, según ha confirmado este sábado su oficina. Kerry, de 80 años, antiguo candidato presidencial demócrata en 2004 y secretario de Estado en la Administración de Barack Obama, había informado de su decisión a la Casa Blanca esta semana. Hasta el momento no se ha dado a conocer quién será su sustituto.
No se ha fijado tampoco hasta ahora una fecha concreta para la salida de Kerry, que tiene previsto participar en el Foro Económico Mundial en Davos (Suiza) la semana próxima y en la Conferencia de Seguridad de Munich en febrero. Se espera que su marcha se produzca en algún momento antes de abril.
La decisión del enviado se da a conocer un mes después de que contribuyera a lograr un acuerdo clave en la COP28, la cumbre de la ONU sobre cambio climático en Dubái el mes pasado, por el que los países se comprometían a “dejar atrás” los combustibles fósiles, el principal factor del calentamiento global.
Sea quien sea su reemplazo, se anticipa una dura batalla para conseguir su confirmación en el Senado. Como enviado nombrado por la Casa Blanca en 2021, Kerry no tuvo que someterse a ese trámite en la Cámara Alta, donde la minoría republicana mantiene bloqueados desde hace meses nombramientos clave del Gobierno, incluido el de Julie Su, la propuesta de Biden para hacerse cargo del Departamento de Trabajo. Pero una modificación en la ley en 2022 incluye ahora este cargo entre los que deben recibir el visto bueno de los senadores para hacerse efectivo.
Al frente de la política estadounidense para el cambio climático, Kerry ha dejado una importante huella. El antiguo secretario de Estado ha encabezado las delegaciones respectivas de su país en tres cumbres de la ONU sobre el clima. Como responsable de la política exterior de Obama, en 2015 había jugado un significativo papel en la firma de los acuerdos de París contra el calentamiento global, que establecían metas para los recortes emisiones de los países firmantes.
Donald Trump retiró durante su mandato presidencial (2017-2021) a Estados Unidos de esos acuerdos. A su llegada a la Casa Blanca, Biden firmó el regreso del país, el segundo más contaminante del mundo, al pacto global. Como enviado para el clima, Kerry asumió una misión especialmente complicada: transmitir al mundo el mensajde que Washington quería volver a ser protagonista en la lucha contra el calentamiento global.
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Durante su etapa en el puesto, el exsecretario de Estado también ha mantenido la sintonía con Xie Zhenhua, su homólogo de China, el otro país principal responsable de las emisiones de carbono y con el que negoció asuntos tan espinosos como si los países en desarrollo debían también reducir sus emisiones. En momentos de crisis en la relación entre los dos Gobiernos, los dos enviados mantuvieron los contactos. La visita de Kerry a China en 2023, en plena crisis entre ambos países por el derribo estadounidense de un globo aerostático chino, representó uno de los pasos clave en el proceso para la normalización de los lazos entre los dos gigantes. Xie, de 74 años, también había anunciado ya su retirada por motivos de salud y será sustituido por Liu Zhenmin, antiguo viceministro de Exteriores.
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